¿Habrá una nueva guerra en Asia?
Se está gestando un gran conflicto militar en el corazón de Asia. La tensión puede desaparecer, pero puede tomar una forma aguda y afectar a cuatro estados, incluidos los dos más grandes del mundo en términos de población, y tres que poseen armas nucleares.
El 23 de mayo (1), se supo que el Ejército Popular de Liberación de China introdujo un contingente militar de cinco mil efectivos en la región montañosa de Ladakh. El incidente no se puede llamar nuevo, ya que el territorio esta en disputa y, de vez en cuando, las patrullas, tanto desde el lado chino como desde el indio, chocan entre ellas. También ha habido conflictos al otro lado de las montañas del Himalaya, en Sikkim. Entonces, en junio de 2017, el ejército indio violó la frontera e invadió el territorio de la vecina Bután, donde los chinos estaban construyendo un camino (2).
Pero el precedente actual es bastante significativo para los estándares internacionales: desde la época de la guerra de Kargil entre India y Pakistán (como resultado de la presión de los Estados Unidos, Pakistán se vio obligado a retirar sus tropas), un contingente militar extranjero invadió el territorio considerado como de la Indio por primera vez.
A juzgar por la naturaleza de los movimientos, la penetración de los militares chinos es estratégica: entraron en Ladakh en cinco direcciones. Cuatro de ellas se encuentran a lo largo del río Galvan, y la quinta cerca del lago Pangong-Tso.
A fines de abril, la parte china ya había visto una mayor actividad en el área, pero la India no tomó contramedidas activas. El 5 de mayo comenzó la primera penetración del ejército chino. Luego, el 12 de mayo, varias invasiones se llevaron a cabo simultáneamente en el área de Demchok, en el sur de Ladakh y en Naku La, en el norte de Sikkim. En Sikkim, 200 tropas chinas estuvieron involucradas, pero en este momento se han retirado. También durante el último incidente, se produjo un tiroteo y, como indican las fuentes indias, 72 soldados indios resultaron heridos (3). También se informa que el EPL (Ejercito Popular de Liberacion de Chiba) está preparando un ataque similar en otro sector: en Ladakh del Sur.
La seriedad de los movimientos chinos también se muestra en las imágenes de satélite, que registraron cambios significativos en el aeródromo de Ngari Guns de 200 km. del lago Pangong Tso (4). Durante este mes hubo cambios significativos, el territorio fue expandido y aparecieron hangares. Además, a principios de mayo, se registraron combates entre cazas J-11 y J-16.
Además, el 25 de mayo, China también anunció el inicio de la evacuación de sus ciudadanos de la India (5). Esto se hizo bajo el pretexto de medidas para combatir el coronavirus, pero dada la escalada en Ladakh, el trasfondo político también es obvio.
Y el 26 de mayo, se supo que en este territorio indio ya hay diez mil militares chinos (6). Además, apareció un aviso oficial en el sitio web del EPL de que todo el valle del río Galvan es territorio chino. Se dice que “el lado indio cruzó la frontera en el valle de Galvan… y cambió unilateralmente el estado de la frontera. El valle de Galvan es el territorio de China, y la situación sobre el control del territorio es bastante clara”.
En los medios de la India, en esta ocasión, puedes encontrar diferentes posiciones. El Hindustan Times, por ejemplo, menciona a Ladakh solo en relación con una infección por coronavirus y las pérdidas de la industria del turismo (7). Pero The Indian Times escribe que “debido al comportamiento agresivo continuo de China… batallones adicionales de la división de infantería fueron transferidos a la región” (8). Ni los medios indios ni los chinos informan sobre ninguna negociación.
Al acusar a China de “comportamiento agresivo”, India se comporta de la misma manera con respecto a Nepal (la frontera India-China de 3.380 kilómetros consta de tres partes separadas por Nepal y Bután). En mayo, se abrió una nueva carretera unilateral entre Dharchula en el estado de la India de Utrakhand y Lipu Leh en Nepal. El camino atraviesa el territorio disputado de Kalapani (9). El ministro de Defensa de la India, Rajnat Singh, asistió a la ceremonia el 8 de mayo. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Nepal declaró que, en conformidad con el Tratado de Sugaul de 1816 (10), que puso fin a la guerra británico-nepalí, todo el territorio al Este del río Mahakali, incluidos Limpiyadhura, Kalapani y Lipu Leh, es territorio de Nepal. Nueva Delhi afirma que se necesita una nueva arteria de transporte para acortar la ruta de peregrinación hindú al Monte Kailash (Tíbet). En noviembre de 2019 (11), se lanzaron nuevos mapas de la India, donde estos territorios están marcados como parte de la India.
Nepal sugirió que India resuelva el problema de pertenecer al territorio de Kalapani controlado por la India, pero Nueva Delhi no responde a las propuestas. El 20 de mayo, Nepal emitió sus nuevos mapas políticos y administrativos (12), donde Lipu Leh, Kalapani y Limpiyadhura figuran como territorio nepalés. En respuesta, un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la India, Anurag Srivastava, dijo el mismo día: “El Gobierno de Nepal ha emitido un mapa oficial revisado que incluye partes del territorio de la India; Este acto unilateral no se basa en hechos y pruebas históricas y contradice la comprensión bilateral de la resolución de problemas fronterizos no resueltos a través del diálogo diplomático. La expansión artificial de las reclamaciones territoriales de Nepal no será aceptada por la India” (13). El acuerdo de Sugaul no fue mencionado en esta declaración.
Y el 25 de mayo, Nepal anunció que su ejército estaba listo para enfrentar a la India en esta región montañosa en disputa (14).
Otra área de conflicto es Cachemira. En 2019, el Artículo 370 fue excluido de la Constitución de la India, otorgando a Jammu y Cachemira un estatus especial; el Estado anterior ahora está dividido en dos territorios aliados: Jammu y Cachemira y Ladakh. En Pakistán, la parte controlada por la India de Jammu y Cachemira se considera ocupada.
Los disturbios en Cachemira han estado ocurriendo durante décadas.
La disputa entre India y Pakistán sobre Cachemira ha estado ocurriendo desde 1947, y las recientes medidas restrictivas relacionadas con la epidemia de virus han convertido el territorio unido a la India de Jammu y Cachemira en una zona completamente cerrada.
India ahora tiene alrededor de 900 mil oficiales militares y policiales aquí; es la región más militarizada del mundo.
Después de que un avión de la Fuerza Aérea de la India fue derribado sobre Pakistán en febrero de 2019 (15), las tensiones alcanzaron su cenit; el primer ministro paquistaní, Imran Khan, entregó al piloto cautivo a la India, pero Nueva Delhi no mostró interés en resolver la relación.
Todo este nudo de contradicciones demuestra el potencial explosivo de la región. Al mismo tiempo, China y Pakistán son aliados de larga data en la lucha contra la India, y más recientemente, Beijing ha apoyado activamente a Nepal, no permitiendo que Nueva Delhi cambie su equilibrio. Esto podría conducir a la creación de una alianza tripartita contra la India, que comenzará a llevar a cabo acciones coordinadas en su contra, incluida la participación en plataformas internacionales. Es cierto que las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre conflictos anteriores (en particular, la necesidad de un referéndum en Cachemira sobre afiliación) no podrían cambiar nada. Veremos cómo se desarrollará la situación ahora.
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera.
Notas:
9.https://www.geopolitica.ru/en/article/after-iok-nepal-new-victim-indias-territorial-aggression